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Con sabor a nada

El jueves 24 se realizó el XXX Congreso Ordinario del SUTEBA en Tigre. Antes, en todos los distritos de Buenos Aires, se realizaron las asambleas donde se elaboraron los mandatos para llevar al Congreso junto con la votación de la Junta Electoral de cara a las elecciones sindicales del 2017.

La particularidad que se vio en las asambleas ordinarias y el congreso del SUTEBA fue un rotundo abloquelamiento de la Celeste junto a todo el FpV-PJ, que más allá de sus rencillas se unen con el norte de derrotar a la oposición Multicolor en la batalla electoral que se viene.
Esta unidad, sin dudas produjo un fortalecimiento de la cúpula sindical a nivel del aparato pero que contrasta y es cuestionada en la lucha cotidiana a nivel de las escuelas, en el enfrentamiento al ajuste, a los planes de reforma educativa y previsional.

Provocaciones Celestes, abandono Multicolor

Lejos de tener un debate político en cuanto a la situación que está viviendo la escuela pública en el marco del plan de ajuste de Macri y los gobernadores y cómo lo enfrentamos, el Congreso del SUTEBA estuvo signado por una permanente serie de provocaciones, gritos, silbatinas, no muy distintos a lo que ya nos tiene acostumbrados la conducción Celeste. Son los métodos propios de una casta privilegiada dispuesta a tapar las voces disonantes, “truchar” padrones sindicales y preparar un escandaloso fraude para preservarse en el poder.
En este marco, la oposición del SUTEBA se retiró fuera del lugar donde se sesionaba y decidió abandonar el Congreso planteando que no estaban dadas las “garantías democráticas”.
Los congresales del PSTU en el Frente Índigo acompañamos esa medida pero entendemos que es un error retirarse. Las condiciones para dar la batalla política y la denuncia de los métodos burocráticos nunca son las óptimas, casi siempre son en el terreno de la burocracia donde difícilmente hay “garantías democráticas”. Para nosotros, abandonar el Congreso fue despejarle el camino para que la Celeste avance libremente sin enfrentarse a los mandatos de las asambleas donde ganó la política gremial de la Multicolor y donde las bases expresan la necesidad de luchar por otro modelo sindical para enfrentar en serio el plan del Gobierno, de ataque a la educación pública estatal y mayor precarización laboral.