other

Construyamos juntos una dirección alternativa

A este año signado por un profundo ajuste, los trabajadores de la educación respondimos con importantes luchas en la provincia de Buenos Aires. A la histórica huelga de principio de año le siguieron, aunque de manera atomizada, un sinfín de conflictos.
En Alte. Brown,  la lucha que protagonizamos docentes, estudiantes y auxiliares de la Media 4 permitió un triunfo a partir de plantarnos y decir ¡Basta! Basta de aceptar esta realidad que es común al resto de las escuelas del conurbano, con baños clausurados o que ni siquiera llegaban a ser una letrina (falta de inodoros, cañerías averiadas, brote de agua por las paredes, olores nauseabundos que invaden toda la escuela). Basta a la falta de mobiliario que deja a alumnos sin el mínimo derecho de sentarse. Basta a la reducción de cupos de comedores escolares y viandas, donde se debe elegir quién come y quién no.
Fue así que luego de 10 días sin clases, con presiones de todo tipo pero que supimos combatir al calor de la unidad y de la movilización, que el Consejo Escolar se vio obligado a reparar el conjunto de los baños, duplicar el número de viandas y suministrar mobiliario y elementos de limpieza.
Producto de este triunfo y de la bronca que provoca el proceso de destrucción que está sufriendo la escuela pública, es que con el desembarco de Nora de Lucia, titular de la DGCyE (Dirección General de Cultura y Educación), a un colegio de Adrogué, la indignación se hizo notar. Acto mediante, luego de terminar su relato fantasioso, respetuosamente pero con convicción le planteamos, junto a varios delegados de escuela: “Sra. Directora nuestros alumnos no tienen bancos… Sra. Directora hay miles de docentes y auxiliares que no cobran… Sra. Directora los cupos de comedor y viandas que reciben los chicos no alcanzan y hay que decidir quién come y quién no…”. Esto generó el aplauso espontáneo de docentes, alumnos y directivos que habían concurrido y no aceptan este estado de emergencia en que se encuentran nuestras escuelas. Así fue que Nora de Lucía junto a Nora Saporitti, Jefa de Inspectores, y Sergio Sanelli, Pte. del Consejo Escolar, se vieron obligados a dar explicaciones, aunque sin soluciones concretas, al estado de abandono que atraviesan nuestras escuelas.
Luego de estos hechos, algunos docentes y varios integrantes del Frente Índigo fuimos convocados por la Jefatura Regional para atender los reclamos a lo que respondimos que la convocatoria era limitada a unos pocos docentes cuando debería convocarse al conjunto de las escuelas, que el objetivo era tratar de desmontar la pelea y que la política de destrucción de la educación tiene distintas aristas: el ajuste económico y la reforma educativa que saquea el conocimiento y se expresa a través del Nuevo Régimen Académico para Primaria, la Ley de Jardines Comunitarios en nivel inicial y programas como el FINES para Secundaria.

Nuestras tareas

Como se ve, en toda esta crónica hay un gran ausente pero que tácitamente encontramos defendiendo la política del Gobierno: es la conducción Celeste del SUTEBA-CTERA-CTA de Yasky y Baradel. Desde el Frente Índigo, siempre sostuvimos que la política de estos dirigentes es defender al Gobierno Nacional, atando a nuestro sindicato detrás del carro de Cristina, perjudicando la defensa de los intereses de los trabajadores de la educación y de la escuela pública.
Por ello es que venimos exigiendo que rompan con este alineamiento, pero paralelamente impulsamos el debate democrático y la organización independiente para llevar adelante los reclamos. Por todo esto es que desde el Frente Índigo llamamos a continuar por este camino, a construir juntos una nueva alternativa de lucha.