25 de agosto de 2020, traducción de Avanzada Socialista
La huelga de los trabajadores de Correos entra en su segunda semana, después del violento ataque del STF (Supremo Tribunal Federal), que por 10 votos a 0, suspendió todos los derechos conquistados por décadas en ese gremio.
Además de repudiar la decisión del tribunal, todo el movimiento organizado debe intensificar ya la solidaridad activa con esta lucha y, en ese sentido, las centrales sindicales brasileñas tienen la obligación de lanzarse a esa acción. Es necesario, como mínimo, convocar a un día nacional de lucha, movilizaciones y protestas en apoyo a esos compañeros y compañeras, en defensa de sus derechos y contra la privatización de esa importante empresa estatal.
Se trata de un durísimo ataque a uno de los gremios estatales con menor salario y que, durante todo este período de pandemia, fue obligado a trabajar, exponiéndose a la contaminación y a la muerte por el coronavirus. Ya son más 100 compañeros y compañeras que murieron y no se sabe cuántos miles fueron infectados, ya que la dirección de la empresa se niega a testear a los /as trabajadores/as y a revelar el número de los ya fallecidos.
A pesar de las pésimas condiciones de trabajo y salarios, la Empresa Brasileña de Correos y Telégrafos, por la dedicación de sus empleados, siempre fue reconocida y defendida por el pueblo de nuestro país, en especial por los más pobres, particularmente por los que viven en las regiones más lejanas de nuestro Brasil. Todos saben acerca de la importancia estratégica y la fuerza social de los servicios que prestan estos valiosos compañeros.
Ante el desmantelamiento de la empresa y los violentos ataques a sus trabajadores, orquestados por los planes privatistas de Bolsonaro y Mourao (1), por Paulo Guedes (2), por el Presidente de la empresa, el general Floriano Peixoto y con la connivencia activa del STF, es preciso que nos sumemos y alimentemos la fuerza y la resistencia de esta huelga. Si de un lado, estamos asistiendo a gobiernos federales, estaduales, prefectos y grandes empresas atacando a nuestra clase, del otro estamos viendo innumerables ejemplos de luchas que resisten esa escalada y arrancan conquistas parciales muy importantes. Son ejemplos la victoria de los metroviarios de San Pablo contra Doria (3) y Bruno Covas (4) y la heroica huelga de los metalúrgicos (5) de Paraná (6) contra la Renault.
Esta lucha se desarrolla en el camino de las movilizaciones de repartidores y repartidoras, de la lucha de nuestro pueblo negro contra el racismo, de las ocupaciones de tierras contra los desalojos, de las mujeres contra la violencia machista y sexual, de los LGBT’s contra toda forma de opresión, quilombolas (7), comunidades tradicionales y pequeños productores contra el latifundio, la minería y los asesinatos de sus líderes.
Sí, es esa la polarización social en que se encuentra la huelga de nuestros compañeros y compañeras de Correos y por eso debemos apoyarlos activamente. El desenlace de esta lucha y sus conclusiones son importantes para toda la clase trabajadora brasileña. Se trata de una lucha frontal contra el gobierno de ultraderecha de Jair Bolsonaro y Mourao y de todos los que defienden el avance de los planes capitalistas en nuestro país.
No se puede perder la capacidad de indignación. Mientras miles de compañeros y compañeras ecetistas (8) sufren tantos ataques, siguiendo el camino de la lucha, nos muestran el camino de la huelga, y nos indican que es hora de unirnos en una acción, cada vez más directa y unificada.
Las centrales sindicales brasileñas para fortalecer ese combate pueden y deben llamar a un día nacional en apoyo a esa huelga, juntando a todos los trabajadores y trabajadoras estatales, como los bancarios amenazados de reajuste cero y quite de derechos por los banqueros, electricistas y petroleros, también amenazados por ataques a sus derechos y privatizaciones; así como impulsar una campaña nacional en defensa de todas las empresas estatales y de los derechos de sus trabajadores. En ese marco vamos a extender esa batalla en unidad con los empleados públicos federales, golpeados por Bolsonaro, Moureau, Guedes y por el Congreso Nacional, que les impusieron dos años sin reajustes de salarios, bajo una sórdida campaña de desmoralización desarrollada por los grandes medios burgueses al servicio del mismo plan ultraliberal.
¡Es hora de una acción efectiva! No hacerlo significa omisión y hasta connivencia con esa ofensiva capitalista. Se trata, por tanto, de tener una actitud unitaria contra este gobierno. Una lucha en defensa de la vida, del empleo, de los derechos y contra las privatizaciones, lucha esta que debemos y podemos reforzar, vía los caminos recorridos por la huelga de nuestros compañeros y compañeras, empleados de Correos.
Por fin, queremos agregar que incorporemos la lucha contra la reapertura de las escuelas, hoy enfrentada por nuestras compañeras y compañeros de la Enseñanza Básica Estatal de incontables estados, así como los profesionales del mundo de la Educación en general.
Vamos juntos. ¡Somos todos ecetistas!
¡Todo el apoyo a la huelga de los trabajadores y trabajadoras de Correos!
Por un día nacional de actos, paralizaciones y protestas en apoyo a la Huelga de Correos
En defensa de la vida, el empleo y contra las privatizaciones
Si no hay empleo ni vacuna, el auxilio no puede terminarse ni disminuir, tiene que mantenerse y aumentarse
Estabilidad en el empleo y reincorporación de todos los despedidos durante la pandemia
Cuarentena general de 30 días con ingresos dignos para todos
¡Fuera Bolsonaro y Moureau, ya!
Geraldinho Rodrigues, dirigente de FENTECT (Federación Nacional de los Trabajadores de Correos y Telégrafos y Similares) y de la Secretaría Ejecutiva Nacional de la CSP-Conlutas.
Atnágoras Lopes, integrante de la Secretaría Ejecutiva Nacional de la CSP-Conlutas.
(1)Mourao, Vicepresidente de Brasil.
(2)Paulo Guedes, Ministro de Economía de Brasil.
(3)Gobernador de San Pablo.
(4)Alcalde de San Pablo.
(5)En Brasil los trabajadores de las automotrices son del gremio metalúrgico.
(6)Paraná, estado del sur de Brasil cuya capital es Curitiba.
(7) Quilombolas: nombre dado a los esclavos negros (y también a sus descendientes) que huían de sus patrones, y se refugiaban en pequeños pueblos llamados quilombos. Actualmente existen en Brasil miles de comunidades quilombolas que reclaman, entre otros, el derecho de propiedad de sus tierras.
(8)Ecetistas: trabajadores de la Empresa Brasileña de Correos y Telégrafos