Con una balanza comercial en caída, un colosal déficit fiscal, miles de millones a vencer de deuda pública, agotada la provisión de fondos del ANSES por la política clientelar, el Gobierno apela en año electoral a un mayor endeudamiento. Con el acompañamiento y silencio de la oposición burguesa, más preocupada por el reacomodamiento de candidatos que en aportar alguna idea, estamos ante un festival de bonos en pesos y en dólares incrementando una deuda impagable. Mientras, el saqueo de las multinacionales continúa, el consumo cae y crece la pobreza a pesar de las hipocresías de Cristina Kirchner relativas a que ésta llegaría sólo al 5%.
Los medios corporativos tratan de canalizar la etapa electoral hacia una polarización entre el kirchnerismo y el macrismo y haciendo creer que estaríamos ante el fin de un ciclo político-económico. Todo es parte de un proceso de ajuste para
continuar beneficiando al imperialismo económico, principalmente el financiero y la continuidad de millonarias ganancias a las patronales de nuestro país. El clima pre-electoral disimula, al amparo del supuesto desendeudamiento K del Estado, el incremento de la deuda pública, externa e interna. Que sea cual sea candidato patronal que asuma en diciembre, continuará honrando su pago con los acreedores capitalistas a costa de los trabajadores y el pueblo.
Cristina Kirchner no se cansa de decir que junto a Néstor fueron pagadores seriales de deuda externa, resaltando la cifra de U$S 190.000 millones entregada a los usureros internacionales. Pero contradictoriamente, en la actualidad la deuda pública no bajó, sino por el contrario aumentó a un ritmo de U$S 10.000 millones promedio por año. Atrasados un año, los datos de la Deuda Pública al 30-06-2014 del Estado Central, reflejaron unos U$S 210.000 millones, incluyendo unos U$S 12.000 millones en manos de los Holdouts (fondos buitres que no se presentaron en los canjes 2005 y 2010). Datos incompletos de un Gobierno que esconde otra parte de la deuda. (1) No computa los cupones PBI (entre U$S 10.000 y 15.000 millones), los juicios de los Fondos Buitre, los reclamos contra la Argentina en el CIADI (2), las refinanciaciones con el Club de París y Repsol, las deudas agregadas hasta hoy por nuevos bonos, otros U$S 10.000 millones, la nueva deuda con China, los intereses a pagar en el futuro, U$S 77.000 millones. La deuda pública total del Estado Central pasaría los U$S 320.000 millones a los que debería agregarse las deudas externas provinciales, y las de empresas estatales como YPF. (3)
Hay que seguir pagando más deuda con más deficit
Los pagos de bonos en 2015 llegan a los U$S 13.800 millones, en 2016 a los U$S 17.400 millones, en 2017 U$S 15.400 millones, en 2018 U$S 12.300 millones, en 2019 U$S 10.000 millones y 2020 U$S 16.300 millones, siendo los más onerosos los del Club de París y los cupones PBI.
El Gobierno deberá pagar unos U$S 14.000 millones de dólares de deuda externa antes de dejar el poder en diciembre 2015. En un escenario electoral, con la baja del precio de los commodities, como la soja, alta inflación y un intento por salir de la recesión, Con una balanza comercial achicándose, un Banco Central con reservas ficticias con imposibilidad de auxiliar al sistema financiero en caso de urgencia, con la necesidad de mayor recaudación, el Gobierno genera emisión de pesos que produce inflación. Necesita fondos, reales o ficticios, para enfrentar una enorme demanda de subsidios a empresas de transporte y energía para mantener ganancias de estas patronales. Para sostener su aparato clientelar, con aportes a gobernadores e intendentes oficialistas, al aparato de La Campora y las relaciones corruptas con empresarios amigos, con “retornos” incluídos. Algunos economistas calculan que el Gobierno, para sostener aumentos de jubilaciones, salarios, planes sociales y la continuación de algunas obras, inyectará a la economía unos $175.000 millones.(5) Algo que popularmante induce a reactivar transitoriamente algo el consumo. Pero el problema es de donde salen esos fondos con la situación financiera estatal en crisis.
Fiesta de bonos de deuda pública
Desde el PSTU (en el FIT) venimos denunciando la operatoria del Gobierno acompañada por la oposición patronal, que para sostener el pago de deuda externa y el enorme déficit fiscal apela a mayor endeudamiento en pesos y dólares. Ya decidió ampliar hasta $10.000 millones la emisión de bonos del Tesoro Nacional (BONAC) con vencimientos en mayo 2016 (6) y a una tasa anual del 30%, muy atractiva para el sistema financiero especulador. Una tasa que paradójicamente superaría la inflación irreal proyectada por el Gobierno que no llegaría al 20%. Además, el ministro de Economía, Axel Kicillof, que está en Rusia, dijo hoy que el Gobierno está considerando vender más bonos en dólares este año, debido a una fuerte demanda de los inversores por deuda ya que Argentina paga hasta un 9% de interés anual. “He visto la espectacular respuesta del mercado cuando salimos con nuestro nuevo bono así que pienso que es una posibilidad”, sostuvo al ser consultado sobre una nueva
emisión de deuda en 2015. Haciendo referencia a los U$S 1.400 millones colocados en abril último y que denunciáramos en Avanzada Socialista. (7)
Es decir, se contrae más deuda pública y externa que pagaremos los trabajadores con ajuste y más ajuste. Mientras tanto hay fondos por más de $2.400 millones para el Centro Cultural Néstor Kirchner, y al mismo tiempo el Hospital Nacional y Público Posadas se cae a pedazos.
Notas:
(1) Ultima información oficial del MECON (Ministerio de Economía)
(2) Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones
(3) Héctor Giuliano – 09-06-2015
(4) Infobae – 29-05-2014
(5) Ieco-Clarín – 21-06-2015
(6) El Cronista – 07-05-2015
(7) Ieco – Clarín – 19-06-2015
Scioli, Macri y Massa honran la deuda externa
No nos debe llamar la atención que en plena campaña electoral los principales candidatos del capitalismo argentino y las multinacionales omitan en sus demagógicos discursos alguna definición clara sobre la deuda pública, y muy especialmente la externa. Scioli, Macri y Massa no hablan del tema, pero algunas de sus declaraciones los muestran como defensores de no hacer absolutamente nada con la estafa de la Deuda Externa, no investigarla y menos evitar su pago.
Daniel Scioli, del Frente para la Victoria: “Hay que atravesar esta coyuntura. La Argentina está pasando estas últimas turbulencias. La Presidenta está buscando dejar el tema de la deuda integralmente ordenado de cara al futuro. Lo mejor está por venir, a partir de lo que se ha hecho”…”Eso va a descomprimir el tema de las divisas y el tema inflacionario y va a acelerar el crecimiento de nuestra economía”, con relación a los fondos buitre.(1) Pidió también “colaborar y acompañar” con la presidenta Cristina Kirchner para el pago de la deuda externa.
“Cuando vos ves del otro lado voluntad de pago y se empieza a regularizar la situación, creás instancias negociadoras. Las últimas resoluciones de Griesa hacían referencia a eso, a que se abran otras instancias negociadoras”. (2) Mauricio Macri, del PRO: “Hay que respetar las reglas de juego o se agravará más la situación económica, el desempleo y el problema inflacionario”, si no se accedía a lo solicitado en el fallo del juez yanqui Griesa, a favor de los fondos buitres. Dijo además que “había que acatar el fallo, no tal cual como dice Griesa, pero sí en cuotas y a largo plazo”, (3) respecto a pagarle a los
Holdouts. “El tiempo se acabó, se acabaron las instancias judiciales. Lo que corresponde para no seguir agravando las cosas es con mucha tranquilidad ir a la instancia que propone el juez Griesa para ver cómo se regulariza
esta situación” (4) Sergio Massa, del Frente Renovador: Está a favor de la “constitución de una comisión bicameral integrada por partes iguales por oficialismo y oposición, que haga seguimiento de todo el tema deuda y que trabaje
de manera articulada con el Ministerio de Economía” y “la idea es construir una política de Estado” (5). En otras declaraciones manifestó que “…si él llega a la Presidencia en diciembre de 2015, su eventual Gobierno saldrá a tomar deuda en el exterior para poder generar condiciones de financiamiento en el país”.(6) “La Argentina tiene que normalizar su situación ante los mercados”. (7) Alguna declaraciones ambiguas, otras más concretas. Pero todas apuntan al reconocimiento de pago a los acreedores externos de una deuda viciada de nulidad desde sus principios, contraída por la Dictadura Militar. Para estos candidatos de la burguesía argentina y las multinacionales hay que honrarla. En el fondo, qué les importa si los que pagamos a los usureros somos los trabajadores y el pueblo.
Notas:
(1) Diario Clarín – 16-10-2014
(2) Perfil.com – 24-08-2014
(3) Agencia DYN – 20-08-2014
(4) y (6) Radio Mitre – 17-06-2014
(5) Arg Noticias – 30-06-2014
(7) Infocampo.com.ar – 11-09-2014