Hoy los trabajadores volvimos a hacer historia, porque salimos a la calle, enfrentamos a la gendarmería y la policía y frenamos, por ahora, la reforma previsional del Gobierno.
Entre gases y balas de goma salimos a defender a nuestros viejos, y nuestro futuro.
Metalúrgicos, choferes, docentes, estatales, partidos de izquierda y organizaciones peronistas, nos unimos en la acción para pararle la mano al gobierno de Macri.
¡Que se vayan todos y no quede ni uno solo! Se escuchaba en la plaza del Congreso en medio de los enfrentamientos.
Hoy quedó claro que los trabajadores y el pueblo no estamos dispuestos a dejarnos pasar por arriba. Que con nuestros viejos no se jode, que con nuestro futuro y nuestro trabajo tampoco y que estamos con la frente y la guardia en alto para enfrentar los ataques del gobierno.
Marcos Peña salió a justificar la represión y a decir que “están abiertos a cualquier tipo de iniciativa”. Encima se rumorea que la quieren meter por decreto. Tenemos que contestarle que no vamos a negociar nada. Que nada bueno puede salir de este gobierno anti obrero, que reprime trabajadores y jubilados, para que las multinacionales y los buitres del sistema financiero se llenen los bolsillos.
Macri no va a cambiar la política, por eso es necesario sacar a Macri como sacamos a De la Rúa en el 2001. Y para eso no podemos esperar hasta el 2019 como dice Cristina y la mayoría de los dirigentes peronistas. Ni podemos confiar en las negociaciones del Congreso. Hoy ganamos porque salimos a la calle, no sólo porque los diputados se pelearon en el recinto o porque Carrió sacó la bandera blanca.
Hoy probamos nuestra fuerza, a pesar que la CGT no se hizo presente y solo estuvieron algunos sectores como seccionales de la UOM, que estuvieron al frente, además de sectores de la Corriente Federal.
Moyano estaba festejando que ganó Independiente, pero no pisó la plaza de Congreso.
Hoy quedó claro que si las conducciones sindicales quisieran, podríamos derrotar las reformas definitivamente y poner contra las cuerdas al gobierno de Macri. Por eso es una vergüenza que hayan levantado el paro, como lo es también que lo hayan convocado solo si se aprobaba la reforma, pero no para evitar que suceda. Hoy le dimos un golpe al gobierno y teníamos que seguir pegando hasta derrotarlo definitivamente. Pero de nuevo la CGT le da tregua, dejando claro que no están a la altura de las necesidades de los trabajadores y el pueblo. Nos mandan a guardar cuando Macri ha largado una cacería, golpeando a periodistas, diputados y lanzando a la Gendarmería y la Policía Federal a detener arbitrariamente a quienes se encuentran en los alrededores del Congreso. No lo podemos permitir, debemos seguir movilizados hasta frenar la represión y liberar a todos los detenidos.
Hoy más que nunca debemos tomar la lucha en nuestras manos y confiar en la nuestras fuerzas. Los trabajadores tenemos que hacer asambleas en todos lados para organizarnos. Debemos construir una nueva conducción desde las bases, desde cada lugar de trabajo, para que nos dirijan los mejores compañeros, dispuestos a luchar hasta el final.
Tenemos que exigirle a nuestros delegados y dirigentes sindicales, que convoquen ya mismo un encuentro nacional de trabajadores para discutir un plan de lucha para seguir peleando.
Hoy ganamos un round, pero la lucha sigue. Hoy hicimos retroceder al gobierno, pero va a volver a intentar meter las reformas. Estamos en medio de una gran pelea, y demostramos que la podemos ganar. Sigamos en las calles, unidos en la lucha, con los dirigentes a la cabeza o con la cabeza de los dirigentes.
¡NO a la reforma previsional y laboral de Macri!
¡PARO NACIONAL y PLAN DE LUCHA YA!
Asambleas en todos lados para imponerlo
¡Abajo el triunvirato de la CGT!
¡Basta de represión! ¡Fuera Bullrich! ¡Libertad a los detenidos!
¡Por otro argentinazo para que se vaya Macri y sus cómplices!