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¡Garanticemos el paro general del 6/4 con asambleas, piquetes y movilizaciones!

 ¡Continuidad con un plan de lucha unificado con medidas contundentes!

¡Por $15.000 de básico en la categoría inicial de la UOM, en una cuota y con ajuste automático por inflación, manteniendo la escala salarial por categorías y ramas del convenio CCT260/75 y Laudo 29/75! ¡Que no toquen ni una coma de su texto para no seguir empeorando nuestras condiciones de trabajo!
¡No a los contratos basura, despidos y suspensiones; ni a los altos ritmos de trabajo que nos lesionan!
¡No «facultar» a los directivos a firmar nada sin previa consulta a las bases en congresos de delegados abiertos, con mandatos de asambleas de fábrica!
¡Derrotemos el plan de ajuste, saqueo y represión encabezado por Macri!

El jueves 6/4 los metalúrgicos debemos parar junto con el conjunto del movimiento obrero. Pero no para que sea un feriado más como quieren los dirigentes de la CGT, «reflexionando en casa» para «descomprimir» nuestra bronca. El 7/3 les arrancamos el paro general para continuar la lucha todos juntos, no aislados. Así podremos lograr lo que necesitamos: derrotar el plan de ajuste, saqueo y represión encabezado por Macri, que beneficia a las patronales extranjeras y también nacionales. Pues pretende imponernos un tope de aumento salarial anual en torno al 20% en cuotas (como firmó Comercio, por ejemplo), empeorar nuestras condiciones y riesgos laborales modificando a la baja los convenios colectivos de trabajo (como firmó Petroleros Neuquén, por ejemplo) y seguir suspendiendo y despidiendo para «reconvertir» las empresas, como en Banghó, etc. Medidas para que sigan ganando fortunas sobreexplotándonos. Por eso es engañoso llamar a «defender la industria nacional» o «la fuente de trabajo», es decir, la empresa. Nosotros queremos defender todos nuestros puestos de trabajo con salarios y condiciones dignas. No las ganancias patronales.
Hagamos asambleas para votar el paro. Para garantizarlo, organicemos piquetes en las fábricas (como resolvieron en los congresos de delegados de Morón y Matanza, por ejemplo) y accesos a los parques industriales. Y con movilizaciones en todo el país. Apoyemos efectivamente todas las luchas en las metalúrgicas (Sidernet, Canale, etc.) y demás gremios, como docentes, petroleros (Chubut), SMATA (GM), gráficos (AGR), etc. Exijamos a su vez a las centrales sindicales continuidad en un plan de lucha con medidas de fuerza contundentes y unificadas.
Defendamos nuestros salarios reclamando un ingreso básico igual a la canasta familiar. En este camino, proponemos luchar ya en la UOM por $15.000 para el salario inicial ($75 la hora), como plantea Matanza o se acerca UOM Córdoba (40%). Pero en una sola cuota, manteniendo la escala salarial por categorías y ramas de nuestro convenio colectivo. Y con ajuste automático por inflación. El 30% que señalan Caló y Gutierrez es insuficiente. Para peor, es sólo para el ingreso mínimo global de referencia. Para el resto… un 23% en cuotas, admitió Caló en Capital. ¿A esto le llama «ningún metalúrgico por debajo de la línea de pobreza»? Las patronales ni siquiera quisieron pagar los míseros $2.000 que sólo firmaron CAMIMA y AFAC con la UOM, para colmo a cambio de modificar nuestro convenio CCT 260/75 «para bajar los costos laborales», comenzando por la rama 4 automotor (Laudo 29/75). ¡Que no toquen ni una coma de su texto! Los «cambios tecnológicos» son una excusa para legalizar categorías flexibles agregando tareas y precarizar las condiciones de trabajo.
¡Nada de «facultarlos»! ¡Que los directivos no firmen nada sin consulta previa a las bases en congresos de delegados abiertos y con mandatos de asambleas de fábrica!

Argumentan que priorizan que tengamos trabajo antes que salarios suficientes… Pero no se plantan ante los despidos (incluso discriminatorios, como en Metalsa, Acindar, etc.) y suspensiones. Por ejemplo, repartiendo las horas laborales entre todos los compañeros, sin achique salarial alguno. «No se puede hacer nada si pagan», nos dicen. Mientras legalizan contratos basura como en BGH, IATEC, etc. Y aceptan el incremento de los ritmos de trabajo para cubrir la menor cantidad de puestos. Con los consiguientes accidentes por «nuestra negligencia».

Avanzada Metalúrgica PSTU