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Desigualdad y explotación laboral

Una delegada metalúrgica de la empresa Mahle, en la que próximamente hay elecciones de delegados, habló con Avanzada Socialista acerca del empeoramiento en las condiciones laborales y de la discriminación que sufren las compañeras en su lugar de trabajo.

“En Mahle trabajamos aproximadamente 800 empleados de los cuales 100 son mujeres. Cuando la empresa se encontraba en manos de una firma nacional las condiciones eran un poco mas favorables.
Al ser comprada esta empresa por capitales extranjeros los cambios se sintieron fuertemente: despidos, sanciones, seguimiento, abusos de poder, falta de sensibilidad, quita de beneficios de reconocimiento que se hacían a todos los empleados. No por la falta de recursos, sino por considerar al empleado inferior a los lideres, responsables y gerentes, que sí seguían teniendo sus beneficios.

Como trabajadora de esta empresa noto la desigualdad entre los de mayor rango y el que no tiene un cargo. Aquello que esta prohibido para todos en la planta, solo es sancionado el operario.
Hay casos de favoritismo donde se otorgan beneficios como categorías, horas extras, cambios de turnos etc, haciendo creer a los compañeros que son favores y no se respeta la ley como corresponde.
A raíz de estas situaciones decidí postularme como delegada contando con el aval de mis compañeras/os sabiendo que ésta es la única manera de defender nuestros derechos como mujeres trabajadoras.
Esta multinacional que se cree dueña de todo incluso de las personas no cumple la ley, he tenido que luchar por la posibilidad de estudiar siendo que la empresa tiene la ideología de que es imposible por nuestros horarios rotativos. De esta manera demuestra que no están dispuestos a perder producción y quieren generar más ignorancia.
Estamos luchando por la salud de los operarios y las enfermedades que se generan a causa de malas condiciones de los puestos de trabajo como por ejemplo: cervicalgia, lumbalgia, varices, hernias etc.: todas estas patologías se producen por no brindar las asistencias necesarias ni médicas ni de enfermería. El personal que está capacitado para primeros auxilios no se encuentra cuando es requerido. Se han hecho pedidos formales en varias oportunidades para hacer, gimnasia, estiramiento, capacitación para buenas posturas. Respecto al tema se han comprometido a dar la solución pero nunca se cumplió.

La situación de las mujeres

Fueron automatizadas la mayoría de las maquinarias utilizadas por los hombres para mayor producción minimizando su esfuerzo, no así con las mujeres que deben levantar repetidamente cajas o canastos de 15kg cada 20 minutos durante 8 horas.
No existe un respeto verbal hacia la mujer ya que estamos en un país que lucha contra la violencia de género, las agresiones se manifiestan a través de chistes machistas y apodos.
Entre los representantes de los trabajadores no se ve que las operarias tengan un rol activo, de 18 representantes solo un 5% es femenino, debido al temor de despido.
En conclusión el deterioro de la salud de los operarios/as es cada vez más notorio debido al ritmo de trabajo que la empresa impone en pos de lograr el objetivo de producción, para lograr ganancias que solo favorecen a los empresarios. Además el clima laboral que se vive genera un estado de tensión constante favoreciendo este deterioro físico y también psicológico.

Por esta razón es importante que en las próximas elecciones de octubre sigamos fortaleciendo a delegados/as que luchen por nuestros derechos y que nos unamos trabajadores y trabajadoras para hacerle frente a esta multinacional que solo piensa en explotarnos cada vez más.