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La insurrección obrero-estudiantil que derribó a la dictadura de Onganía

Hace 46 años, la ciudad de Córdoba se levantaba pero no de cualquier manera: decenas de miles de personas que integraban los sindicatos obreros y estudiantiles, partidos políticos y la clase media en general, le decían basta a la dictadura de Onganía.

“Generalizar el Cordobazo hasta llegar al argentinazo”

Con esa consigna arrancó la campaña electoral del PST para las presidenciales de 1973. Nahuel Moreno decía que el llamado a elecciones y la legalidad conseguida, eran producto del Cordobazo, eran por lo tanto una conquista de las masas y que quien no las aprovechaba las traicionaba. Nuestro partido supo aprovechar esas conquistas llamando a construir un Polo Obrero y Socialista en esas elecciones.
El Cordobazo tuvo un contexto mundial de luchas contra regímenes reaccionarios, y por reivindicaciones económicas y sociales. Dos grandes ejemplos fueron la “primavera” de Praga y el mayo francés de 1968. Y estaban por supuesto las influencias de la revolución cubana.
En 1966, a meses de comenzada la dictadura en la Argentina, ya se perfilaban los futuros acontecimientos. En julio de ese año, Santiago Pampillón, estudiante universitario y operario de IKA Renault, que protestaba en pleno centro junto a sus compañeros, exigiendo ¡asamblea! y ¡gobierno tripartito!, fue asesinado en plena Avenida Colón por la policía. Este joven era mendocino, vivía en una pensión y asistía al comedor estudiantil como muchos. Sus restos fueron velados en el local de la CGT, y acompañados por una gran movilización.
A los tres años de la dictadura de Onganía, la percepción de las masas era negativa por la falta de libertades democráticas, cuya máxima expresión fue la proscripción del peronismo. Y por los intentos de eliminar conquistas obreras para favorecer a las multinacionales, cuyo representante era el ministro de economía, Krieguer Vassena.
Eso provocó un reguero de movilizaciones contra los milicos: el Correntinazo, donde los estudiantes se levantaron contra el aumento de precios en el comedor universitario; lucha que terminó con un joven muerto: Cabral. Hubo rosariazos, tucumanazos, conflictos en Mendoza. Todo el país, con la clase obrera a la cabeza, y a pesar de todas las restricciones políticas, se reorganizaba para tirar a aquella nefasta dictadura y a los planes del imperialismo.

Convocatoria a paro general y acontecimientos del 29 y 30 de mayo

Córdoba era un polo industrial que atraía a trabajadores de todos lados. A esto se le sumaba una universidad con muchos años de historia que también convocaba a estudiantes de todas partes, con un comedor universitario como lugar de encuentro y debate político. Quien gobernaba era Caballero, un interventor designado por Onganía.
La Central sindical cordobesa coincidía con la CGTA (CGT de los Argentinos) peronista opositora.
La CGTA (de Ongaro) con la CGT oficial (de Vandor) convocaron a un paro nacional de 24 horas para el 30 de mayo. En Córdoba se resolvió uno de 48 horas desde el 29 de mayo, de carácter activo con abandono de tareas y movilización al centro -para diferenciarse del paro dominguero vandorista. Todo esto fue decidido el 28 de mayo entre los dirigentes del SMATA, UTA, UOM y Luz y Fuerza, en base a las asambleas, y con el apoyo de la Federación Universitaria que siempre acompañaba las campañas de la CGTA.
El Cordobazo selló la unidad obrero–estudiantil, acabando con años de enfrentamientos impulsados por las direcciones antiobreras (gorilas) que se habían impuesto por décadas entre los estudiantes
Se peleaba contra la derogación del sábado inglés, que les había permitido a los trabajadores hacer media jornada pero cobrándola por día completo, en el SMATA. Otro elemento era el de las quitas zonales en la UOM, que consistían en que los salarios del interior eran más bajos que los de Buenos Aires.
La UTA de Atilio López estaba disconforme por la privatización de la empresa municipal, y temían la pérdida de fuentes laborales.
Los estudiantes estaban disconformes por la intervención de la Federación, y por los exámenes de ingreso que había impuesto Onganía.

Los hechos

El mismo 29 a la mañana 4.000 mil obreros de IKA Renault bajaron hacia el centro, para confluir en la sede de la CGT de Av. Vélez Sársfield.
El centro estaba cortado por la policía para impedir que se hiciera el acto planeado. Pero el asesinato del estudiante y trabajador Máximo Mena, enfureció a toda la población. A partir de ese momento, la policía ya no pudo hacer más nada y debieron replegarse. Los dirigentes perdieron el control. En la ciudad abundaron los comercios quemados, sobre todo los que representaban a firmas multinacionales. Se armaron las famosas barricadas en los barrios cercanos, muchos autos fueron incendiados.
Ante el descontrol, el ejército intervino y se llevó detenidos a Tosco (Luz y Fuerza) y a Elpidio Torres (SMATA).
El Cordobazo terminó con decenas de muertos y heridos, pero marcó el inicio de la caída de la dictadura. Y dio origen al “clasismo cordobés”, que vio frustrado su desarrollo a partir de dos grandes debilidades: por un lado, la influencia de corrientes ultraizquierdistas que no tuvieron política hacia el resto del movimiento obrero que seguía bajo el control de la burocracia. Por otro lado, la falta de una propuesta política de independencia de clase, que fuese una alternativa al planteo de la burocracia que centraba todo en “la vuelta de Perón”. Sólo algunos de sus dirigentes dieron el salto a la lucha política revolucionaria, como fue el caso de José Francisco Páez que ingresó a nuestro partido, el PST.

Conclusiones y tareas pendientes

Muchas cosas pasaron en estos 46 años, pero lo fundamental sigue igual. Continuamos con la necesidad de enfrentar el ajuste de las patronales y del gobierno, y a las burocracias que están con uno u otro sector patronal. También tenemos que vencer las posiciones sectarias y avanzar hacia la unidad para luchar. Unidad para impulsar que el conjunto de los sindicatos junto a las federaciones estudiantiles se movilicen en el paro de la CGT, para hacer una verdadera huelga general. Unidad para que el único frente electoral con independencia de clase no se rompa, el FIT, y se amplíe al resto de los partidos y luchadores que compartan su programa, y así los trabajadores no terminen recurriendo al “voto útil” de Macri o Massa.
La unidad para luchar es una gran lección del Cordobazo. Pero hay otra lección: la necesidad de una dirección revolucionaria para poder acabar definitivamente con el poder de las patronales. De lo contrario todo se vuelve a repetir.


A 41 años de la Masacre de Pacheco

Este 29 de mayo se cumple un nuevo aniversario de lo que se recuerda como la Masacre de Pacheco. Grupos parapoliciales del gobierno de Perón, luego conocidos como la Tripe A, entraron a los tiros al local de nuestro partido, el PST (Partido Socialista de los Trabajadores), en La Paloma, Gral. Pacheco. secuestrando a a 3 compañeros y 3 compañeras. Las compañeras fueron abandonadas a una cuadras de distancia. Los tres compañeros fueron fusilados. Eran Oscar Mezza de 27 años delegado de Astarsa, Tony Moses de 24 años obrero metalúrgico de Wobron, y el Tano Zida de 22 años, presidente del Centro de Estudiantes  del Colegio Industrial de Tigre.
Estos compañeros fueron de los primeros  asesinados por las AAA (Alianza Anticomunista Argentina) que luego se incorporaron como parte de la siniestra dictadura militar, con un plan sistemático de liquidar toda organización obrera y estudiantil que enfrentara los planes de ajuste.
Y también sufrimos el último de los secuestros y asesinatos, cuando la dictadura entró en retroceso por la resistencia y repudio popular. Fue el asesinato  de Ana María Martínez, todo un símbolo para nosotros.
Este 29 de mayo a las 18 hs en el cruce de Pacheco (197 y ruta 9) la comisión por Ana María Martínez integrada por compañeros, familiares y amigos, que luchamos por el esclarecimiento y castigo  de los responsables, realizaremos un acto homenaje a los compañeros.
Hoy la lucha de nuestros compañeros asesinados sigue más vigente que nunca, los Kirchner descolgaron el cuadro de Videla, pero sigue la represión con 7.000 compañeros procesados, condenados como los petroleros de Las Heras, desaparecidos como Julio López, represores como Milani al frente de las FF.AA, y el Proyecto X  y la Ley Antiterrorista para tratar de frenar las luchas contra los  planes de ajuste.

Por todo esto te invitamos a ser parte de este acto unitario y ayudarnos a construir el PSTU.