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¿POR QUÉ HAY INFLACIÓN?

La inflación disminuye el poder adquisitivo de nuestro salario y deteriora nuestra calidad de vida. ¿Por qué se produce este fenómeno?

El papel moneda emitido por el Banco Central (BC), con un respaldo de dólares y metales preciosos, permite establecer un equivalente general para todas las mercancías, y facilita el comercio y la inversión. Pero como la “maquinita” la manejan los gobiernos, suele pasar que la utilicen para cubrir gastos del Estado que superan sus ingresos. De esa manera se devalúa el papel moneda frente a las mercaderías. Esquemáticamente, si en un año se emite un 50% más de lo necesario va a ocurrir que va aumentar en la misma proporción la cantidad de billetes que voy a necesitar para comprar lo mismo. Por eso, el mismo paquete de yerba que salía $40, un año después saldrá $60.

Explicaciones intencionadas

Pero, ¿por qué se produce esa mayor emisión monetaria? Según los economistas “neoliberales” afines al macrismo, el Estado gasta más de lo necesario y eso obliga a emitir para cubrir el déficit. Y como los aumentos de salario generarían un aumento de consumo, nos dicen que eso obligaría a emitir más para cubrir ese aumento del comercio. Los economistas kirchneristas, peronistas y “progresistas”, dan la misma explicación pero critican las “recetas neoliberales” de despidos, recorte de presupuesto estatal y rebaja salarial, aunque cuando gobiernan las aplican, matizándolas con intervención estatal para “controlar” los precios y conviviendo con la inflación para mantener la “actividad económica”. Con ambas recetas los perjudicados somos siempre los trabajadores y sectores populares, y sus explicaciones no son más que falsos argumentos para justificar el ajuste y beneficiar a los grandes empresarios y multinacionales. Sea con recortes directos al salario, o con el “impuesto inflacionario”, que también los rebaja y permite aumentar las ganancias patronales y distribuirlas entre ellos.

La verdad es bien distinta. La mayor emisión monetaria tanto durante los gobiernos de Cristina como con el de Macri, se debe a la compra de dólares para pagar la fraudulenta e ilegítima deuda externa (10.000 m/d anual promedio), dada la reducción de ingresos por la caída de los precios internacionales de las materias primas. Para agravar las cosas Macri redujo o eliminó retenciones a las exportaciones del agro, reduciendo así la entrada de divisas al BC. Esto favorece también el chantaje de los exportadores que buscan vender sus productos aquí a precios más altos y equiparables al precio en dólares del mercado internacional. Sumémosle a esto los subsidios estatales que aún cobran la mayoría de las empresas de transporte para mejorar sus ganancias. Por otra parte el control monopólico de la economía por parte de grandes empresarios y multinacionales permite que hagan ganancias extraordinarias aumentando artificialmente precios. También los tarifazos de las empresas privatizadas de servicios y el aumento de los combustibles, que benefician a esos sectores, tienen efecto inflacionario.